En el socialismo confluyen distintas expresiones del pensamiento emancipador y transformador del mundo contemporáneo, insertas todas en la matriz crítica de la sociedad capitalista. Es así que convergen en su seno el pensamiento marxista enriquecido por todos los avances científicos y el devenir social, con las mejores tradiciones humanistas y con los valores solidarios y libertadores del mensaje cristiano.
En el escenario político nacional e internacional, el socialismo aspira a ser un instrumento privilegiado de la lucha de los trabajadores manuales e intelectuales, de todos los que sufren algún tipo de opresión y del pueblo en su conjunto, por abrir paso a una sociedad basada en la solidaridad, en la justicia social, en la más profunda democratización de todas las esferas de la vida y orientada, en definitiva, a la más plena y libre realización del ser humano, es decir, a la construcción de una sociedad socialista en el continente y el mundo